Se suponía que esta temporada era para tomar las cosas con calma y pasarle la batuta a la próxima generación, pero los Cerveceros del 2024 tenían otros planes.

En lugar de aceptar un año de transición, la novena de Milwaukee se convirtió el miércoles en el primer equipo de Grandes Ligas en asegurar un boleto a la postemporada, capturando el título de la Central de la Liga Nacional gracias a la derrota de los Cachorros a manos de los Atléticos. Retrasaron la celebración hasta el final de una victoria por 2-1 dejando en el terreno a los Filis, impulsada por el triple abriendo inning del fenómeno venezolano de 20 años, Jackson Chourio, en la parte baja de la novena entrada.

Cuando Chourio anotó al pisar el plato con el sencillo ganador de Jake Bauers, los Cerveceros finalmente pudieron desatarse.

La celebración inicial en el American Family Field fue modesta, ya que los Cerveceros, que todavía persiguen a los Filis y Dodgers por uno de los dos primeros sembrados de la Liga Nacional (y un pase directo a la segunda ronda), se estaban preparando para su juego nocturno contra Filadelfia. Cuando el cerrador de los Atléticos, Mason Miller, subió al montículo en Wrigley Field, los jugadores de los Cerveceros salieron del clubhouse y se reunieron en la sala de pesas para ver juntos el out que aseguró la división.

“Hemos estado trabajando juntos desde mediados de febrero, así que poder disfrutar ese momento con los muchachos y solo con los muchachos fue algo de lo que hablamos”, dijo Rhys Hoskins, uno de los pocos jugadores en el clubhouse con un anillo de Serie Mundial. “Esas son las cosas que vamos a recordar más allá de este año”.

La verdadera fiesta llegó más tarde, cuando los Cerveceros pudieron hacer un brindis por ganar la división por segunda temporada consecutiva, la tercera vez en los últimos cuatro años y la cuarta en los últimos seis en los que las Mayores han jugado una temporada completa. Incluyendo la campaña abreviada del 2020, los Cerveceros han llegado a la postemporada en seis de los últimos siete años.

Este año, sin embargo, fue diferente.

Los Cerveceros de esta temporada ganaron sin su ex mánager Craig Counsell (agente libre), sin sus aces Corbin Burnes (canjeado) y Brandon Woodruff (lesionado). Ganaron a pesar de que lesiones en la espalda dejaron fuera al Relevista del Año de la Liga Nacional, Devin Williams, durante los primeros cuatro meses, y al líder de bateo Christian Yelich durante los últimos dos.

Ganaron con un equipo caracterizado por la velocidad y la defensa, con prospectos como el fenómeno venezolano de 20 años Jackson Chourio, el jugador más joven en debutar con los Cerveceros en el Día Inaugural desde que Robin Yount lo hiciera hace 50 años. Además, contaron con un cuerpo de lanzadores formidable con la segunda mejor efectividad en el Viejo Circuito, destacando héroes inesperados como el derecho Tobias Myers, un jugador de 26 años que hace dos años tenía un récord de 1-15 y una efectividad de 7.82 en las menores, pero que este año posee la cuarta mejor efectividad en Grandes Ligas desde principios de junio.

Y ganaron gracias a Pat Murphy, el veterano instructor universitario que llegó a Milwaukee como coach de banca en 2016 por petición de Counsell, su antiguo alumno en Notre Dame. Murphy cumplió 65 años en noviembre pasado, poco después de finalmente obtener su oportunidad de ser mánager de Grandes Ligas a tiempo completo.

En el Día Inaugural, el sistema PECOTA proyectó 79 victorias para los Cerveceros. Alcanzaron ese total con un mes completo de la temporada regular aún por disputar, y con el mejor diferencial de carreras en las Mayores.

Luego celebraron el boleto más temprano a la postemporada en la historia de la franquicia.

“Trato de no prestar demasiada atención a esas expectativas”, dijo el gerente general Matt Arnold. “Si acaso, nos unieron. Nos ayudan a darnos combustible. Eso no significa que estén necesariamente equivocados, porque muchas veces esas proyecciones son acertadas. Pero creo que nos impulsa cada día a preguntarnos: ‘¿Cómo podemos mejorar?’”

Durante toda la temporada, Murphy encontró pequeñas maneras de recordarles a los Cerveceros quiénes son. El fin de semana pasado en Phoenix, por ejemplo, los Cerveceros escucharon un intenso discurso previo al juego de parte de Dustin Pedroia, quien jugó bajo Murphy en la universidad Arizona State antes de convertirse en Novato del Año, JMV de la Liga Americana y campeón de la Serie Mundial.

“No tenemos superestrellas”, dijo Murphy. “Puedes decir que [el dominicano Willy] Adames está teniendo un año de superestrella, y [el venezolano William] Contreras. Puedes decir que Chourio será una superestrella algún día.

“Pero cuando comenzamos este año, era: Este equipo está diezmado por lesiones. Este equipo acaba de hacer un gran canje [de Burnes]. Devin estuvo fuera casi todo el año. Recortaron el presupuesto. Era como, ‘Muchachos, esto es lo que somos. ¿Qué vamos a hacer? ¿Vamos a tirar la toalla ahora, o vamos a pelear?’

“Venimos batallando desde entonces”.

Ahora, ¿podrán descifrar el código que les ha eludido durante esta racha y llegar lejos en octubre?

Adam McCalvy cubre a los Cerveceros para MLB.com