Un dudosísimo penalti en el minuto 93' del partido, cuando iban 0-0, resolvió un River Boca que terminó en escándalo. El penalti, muy protestado, fue marcado por el colombiano Miguel Ángel Borja. Un penalti que, tras ser marcado, provocó la ira de los jugadores xeneizes. El árbitro nunca consultó con el VAR.

A partir de ahí, se vino el escándalo. El gol provocó un tumulto y una tangana monumental, con protestas y palos por todos lados. Como consecuencia de la tangana fueron expulsados seis jugadores: tres por parte de River (Palavecino, Centurión y Elías Gómez); y tres por parte de Boca (Merentiel, Valentini y Equi Fernández), amén del técnico visitante, Jorge Almirón.

El partido estuvo suspendido un cuarto de hora ante la pelea monumental en los banquillos por la provocación del local Palavecino tras el 1-0. El colegiado Herrera fue rodeado por los jugadores de Boca, pero el partido se pudo reanudar finalmente. Boca acabó con ocho jugadores y River, con 10, pues dos expulsados estaban en el banco.

Dos minutos de prolongación en los que Boca no pudo hacer nada y lo perdió 1-0. El partido se jugó sin público visitante, como es habitual en esta Liga.