Francesca Jones, la tenista con ocho dedos que desafía a los médicos y jugará su primer 'grande'
La clasificación de la tenista británica Francesca Jones para el cuadro final del Abierto de Australia permitió conocer su historia de superación: la tenista nació con displasia ectodérmica por electrodactilia, un síndrome poco frecuente que provocó que sus manos y pies se desarrollaran de forma anormal. Jones tiene tres dedos en el pie derecho, cuatro en el izquierdo y tres dedos y un pulgar en cada mano. Pero, a sus 20 años, está dispuesta a que sea su juego y no su enfermedad la que la defina.
La británica confía, con su propio ejemplo, en cambiar la perspectiva de las personas sobre lo que se puede lograr en la vida. Ella rompió ya todos los prejuicios clasificándose para el cuadro final del Gran Slam australiano, el primero de la temporada.
Los médicos me dijeron que no podría jugar al tenis"
En declaraciones realizadas a la ITF para un reportaje, Jones, actual 241° del ranking WTA, reveló que el tenis le resultó vital para ponerse nuevos desafíos pese a sufrir esta enfermedad. "Tengo grandes objetivos por lograr y quiero cambiar la perspectiva de la gente. El tenis me ha ayudado a mí y mis objetivos y también me ha ayudado a ser quien soy sobre la cancha y espero que lo siga haciendo", sostuvo quien es entrenada por el español Andreu Guilera.
Y agregó: “Mi síndrome es muy raro. Es complicado porque hay numerosos síntomas. Los míos son que tengo tres dedos en el pie derecho, cuatro en el izquierdo y cuatro en cada mano. Los médicos me dijeron que no podría jugar al tenis. Y mi reacción fue: ‘Ya que dijeron eso, voy a demostrarles que están equivocados'. Digamos que mi cuerpo no está previsto para ser el de una atleta, pero para mí eso no quiere decir que no pueda llegar a serlo. Hasta un Rolls Royce se construye de la nada".
En la fase de clasificación, disputada en Dubai, venció a la rumana Monica Niculescu (6-3 y 6-2), a la croata Jana Fett (7-6, 2-6 y 6-1) y a la china Jing Lu (6-0 y 6-1). "Estoy muy feliz de clasificarme y tengo muchas ganas de irme a Australia. Nunca había estado antes y estoy seguro de que será una experiencia increíble", dijo la nacida en Bradford pero con residencia en Barcelona que tendrá un salto en el ranking hasta el puesto 219.
En la previa del último partido, comparó su clasificación con estar en un reality show: "Es algo genial. Como en el Factor X, pasas a la siguiente etapa, así es como se siente. Simon Cowell -uno de los jurados del show que busca talentos musicales en Gran Bretaña- le dice que estás en un vuelo hacia el espectáculo en vivo".
Así demostró que no hay barreras, al menos para ella, para llegar a la elite del tenis, en contra incluso de la opinión de los médicos. Le dijeron que con solo tres dedos y un pulgar en cada mano no podría jugar a tenis. "Sus comentarios jugaron un papel importante en las decisiones de mi vida y los compromisos profesionales hasta la fecha. Siempre he querido enorgullecer a mis padres más que nada. Sé que tengo la fuerza mental y trato de usarla lo mejor que puedo, pero hay muchas cosas que deben unirse", reconoció.
Fran Jones está demostrando, sin embargo, que los especialistas estaban equivocados. Será una de las contendientes en el 'major' australiano.