El líder del Rally Dakar 2022, Nasser Al-Attiyah, es un poco menos líder esta noche. En concreto, cinco minutos menos. Los que ha recibido de penalización por no llevar correctamente abrochados los cinturones de seguridad y el HANS durante un minuto y 45 segundos durante la etapa 8.
Los comisarios recibieron una alerta a partir de un vídeo publicado en redes sociales en el que se observaba como Al-Attiyah y Baumel reanudaban la marcha de forma inmediata tras cambiar la rueda en un pinchazo. La investigación posterior de los oficiales, revisando las cámaras internas del Toyota Hilux que montan los vehículos, mostró la infracción.
"Las cámaras mostraron sin ningún género de dudas que, inmediatamente después de subir al vehículo, el piloto engranó la primera marcha y avanzó. El vídeo, incluso, muestra que la tripulación empleó un minuto y 45 segundos en abrocharse los cinturones", reza la resolución de los comisarios que añade que "durante un corto periodo de tiempo el copiloto agarró el volante para permitir al piloto abrocharse el cinturón"
Así, el catarí se mantiene líder de la general y aún con una ventaja notable, pero ahora se reduce a 34:05 minutos respecto a Loeb que, a su vez, se salvó ayer de otra penalización de cinco minutos por perder una de sus ruedas de repuesto durante la especial.
De nuevo en el centro de la polémica
Con esta acción Al-Attiyah vuelve a estar en el centro de la polémica, aunque esta vez con pruebas fehacientes, después de que Sven Quandt, uno de los máximos responsables del equipo Audi, insinuara que el catarí tenía información adicional al roadbook, lo que le habría permitido sortear la dificultad de navegación que escondía la primera etapa.
Además, Al-Attiyah ya merodeó la penalización en la etapa 2, que su Toyota completó con el data logger de la FIA (el sistema que registra las prestaciones del vehículo) desconectado. El de Toyota fue sancionado con 5.000 euros de multa y una descalificación suspendida a condición de que esa situación no se volviera a repetir.