Se acabó: Ben Simmons no volverá a jugar con los Sixers
Ben Simmons se ha declarado en rebeldía. Según informa Adrian Wojnarowski (ESPN), el base australiano no se presentará a la apertura del campus de entrenamiento de los Sixers y tiene la intención de no jugar de nuevo con la camiseta de Philadelphia. "Simmons no ha hablado con el equipo desde su reunión a finales de agosto cuando ya comunicó esta decisión a la directiva", señala el periodista estadounidense.
A falta de siete días para el inicio de los entrenamientos oficiales, que los Sixers realizarán en Candem (Nueva Jersey), Simmons ha lanzado un órdago para salir de la franquicia y que le puede salir caro: desde sanciones a suspensiones pasando por retención de salario. Las multas van desde 227.000 euros por faltar a cada entrenamiento, hasta un total de 1,3 millones si no se presenta a ninguno y causa baja también en la pretemporada. Amenazas que el australiano está dispuesto a soportar con tal de salir de Philadelphia, que busca comprador por su estrella.
Los intentos de los Sixers
Los de Doc Rivers han intentado convencerle, ya que presentarse y jugar sería la mejor opción para el equipo. Si hace un buen papel y muestra buena forma, aumentaría su valor, despejaría posibles dudas y sería más fácil introducirlo en algún intercambio. El jugador no ha sido receptivo a esas peticiones.
Simmons pide que acepten alguna oferta, le dan igual las condiciones. Ha habido acercamientos con varios equipos, pero ninguna oferta encima de la mesa. Tiene contrato vigente hasta 2025, por 145 millones de dólares tras firmar una renovación por 177 millones en julio de 2019 que empezó a cobrar el pasado verano. Los esfuerzos de los de Philadelphia por tratar de convencer al australiano para que se presente y juegue, de momento han sido en vano, la decisión de no presentarse sigue vigente.